Inseguridad digital: Cómo proteger tus compras del Día del Padre del ciberdelito

Especialistas en ciberseguridad advierten sobre el masivo aumento de fraudes digitales en fechas clave, compartiendo recomendaciones esenciales para que usuarios y marcas refuercen la seguridad en el e-commerce.
Con el Día del Padre a la vuelta de la esquina, la temporada de e-commerce se intensifica, y con ella, los riesgos de ciberdelito. Los ciberdelincuentes aprovechan la fecha para desplegar todo tipo de engaños con el objetivo de robar datos personales y financieros. Ante este escenario, empresas de ciberseguridad ofrecen consejos prácticos para ayudar a los usuarios a realizar compras seguras desde sus dispositivos móviles y orientan a las marcas sobre cómo proteger mejor sus plataformas digitales.
“Durante el Día del Padre, los atacantes aprovechan la urgencia emocional y las ofertas por tiempo limitado para difundir enlaces maliciosos o fomentar comportamientos inseguros dentro de las aplicaciones. Por eso es importante que los usuarios estén alerta y, especialmente, que los desarrolladores y las marcas protejan sus aplicaciones con herramientas robustas que puedan garantizar un entorno de compra seguro y fiable”, afirma Chris Roeckl, director de producto de Appdome.
El crecimiento del fraude digital en Argentina: una necesidad urgente de protección
De acuerdo a datos de la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (UFECI), los fraudes informáticos representaron más del 65% de las denuncias de delitos digitales recibidas en 2024. Este dato se complementa con un crecimiento sostenido de estafas a través de aplicaciones móviles, especialmente durante eventos de consumo masivo como el Día del Padre. En estas fechas, se intensifican las campañas falsas de promociones, los links fraudulentos y el robo de datos personales, haciendo que fortalecer la seguridad en los entornos digitales no sea solo una recomendación, sino una necesidad urgente.
Appdome y otros especialistas advierten sobre los cuatro engaños más comunes:
- Cuidado con las apps de descuentos falsas: Una de las estrategias más comunes es la creación de versiones falsas de apps populares o el envío de promociones que imitan sitios web legítimos para robar datos. Es clave descargar apps únicamente desde tiendas oficiales y desconfiar de enlaces que prometen “descuentos exclusivos” sin respaldo directo de las marcas.
- Verificar siempre la autenticidad de las promociones: Si un anuncio suena demasiado bueno para ser cierto, probablemente sea un engaño. Se recomienda ingresar directamente al sitio web oficial de la marca o usar su aplicación oficial, en lugar de hacer clic en banners o correos sospechosos. Las promociones reales están claramente señaladas y no requieren compartir información sensible para acceder a ellas.
- Proteger el dispositivo móvil con apps seguras: Los usuarios pueden fortalecer su seguridad utilizando aplicaciones que integren funciones de protección activas. Las marcas, por su parte, deben asegurarse de que sus apps cuenten con medidas como protección contra ingeniería inversa, detección de malware, verificación de integridad y anti-bots. “Los desarrolladores tienen un rol fundamental en garantizar que las apps sean entornos seguros. La protección debe estar integrada, no ser una solución secundaria”, señala Roeckl.
- Evitar redes Wi-Fi públicas para transacciones: Realizar compras desde redes públicas es uno de los errores más frecuentes, ya que estas conexiones suelen estar desprotegidas y pueden ser utilizadas para interceptar datos personales o financieros. Se recomienda hacer las compras únicamente desde redes seguras y confiables, como la conexión móvil o una red Wi-Fi doméstica protegida con contraseña.
Aplicaciones más seguras sin sacrificar experiencia de usuario
Propuestas como las de Appdome permiten a las marcas incorporar múltiples capas de seguridad en sus aplicaciones móviles sin necesidad de escribir una sola línea de código. Su plataforma automatizada protege contra amenazas en tiempo real y asegura que cada transacción se realice en un entorno seguro, incluso durante los momentos de mayor tráfico como el Día del Padre.
Para los consumidores, esto se traduce en mayor tranquilidad al usar sus aplicaciones favoritas. Para las empresas, es una oportunidad de reforzar la confianza con sus usuarios y demostrar un compromiso real con la seguridad digital. “Una app vulnerable pone en riesgo no solo los datos del usuario, sino también la reputación de la marca. Proteger la experiencia móvil es proteger la confianza del cliente”, concluyó Roeckl.